FILIPINAS COMPARTIENDO AVENTURAS CON MI MADRE

Me gustaría empezar este post, dando las gracias aquellos que leéis mi blog, por mi sorpresa creo que es más gente de la que me pensaba. Sé que a veces los post son un poquito largos, pero para mí es como un diario personal que tendré de este viaje para toda mi vida. También agradecer los comentarios que vais dejando me encanta leerlos.

Nunca me hubiera imaginado escribir un post sobre aventuras con mi madre y menos en un país de Asia, en Filipinas. Hace muchos años que les digo a mis padres lo mucho que me gusta todo el Sureste asiático, y que deberían algún día visitarlo. Ellos me miran pensando, si si algún día… pero mama a ti si que te llegó ese día. Mi madre decidió venirme a visitar durante sus vacaciones de Navidad, dejando a mi padre y mi hermano en casita, ya que ellos no podían por trabajo.

Familia, se que han sido unas navidades un poquito raras para todos, porqué la mama no ha estado en casa, porqué habéis pasado Fin de año solos, porqué os levantasteis el día de Reyes sólo son un par de zapatos, así que por todo esto quiero daros las gracias a ti papa y Xavi por animar a mama a que haya venido a verme, y que pueda escribir estas palabras.

Si queríamos aventuras, las hemos tenido. Mi madre llegaba el día 27 de Diciembre a las 3 del mediodía  al aeropuerto internacional de Manila. Yo a la 1 del mediodía ya estaba de camino para el aeropuerto. Mi  gran sorpresa fue cuando vi que no podía entrar al aeropuerto, me tenía de esperar en la calle, detrás de una barandilla. Había dos salidas y yo sólo pensaba, madre mía vaya lio. Estuve casi dos horas  preguntando explicando que llegaba mi madre, que no hablaba inglés, etc…Pero no me dejaron pasar. A las 4 de la tarde empezaron a salir los pasajeros de Qatar Airways, pero mi madre no salía… yo ya estaba a punto de entrar en una crisis nerviosa, cuando la vi aparecer con su sonrisa y mochila. Que ilusión me hizo.

Como yo ya me pensaba, había encontrado un chico en el aeropuerto de Barcelona que también volaba a Manila, y le había pedido si podía hacer el transfer con él, y si la podía ayudar que no hablaba inglés. Es muy lista así que no sé porqué me preocupé tanto.

Pasamos la noche en un hotel cerca del aeropuerto, porqué al día siguiente había reservado un vuelo para ir a Palawan, mi isla favorita en Filipinas. El avió salió con retraso. Llegamos a Puerto Princesa y cogimos una furgoneta hacía Sabang, ciudad conocida por el Rio subterráneo. Este río ha sido seleccionado para entrar como una de las 7 maravillas naturales del mundo. Yo no lo había visitado con Alex, así que pensé que podría ser una cosita bonita hacer con mi madre y un poquito cultural. Llegamos a Sabang y los tiquetes para ir al “ Underground River”, estaban todos vendidos. Hacía una semana que no salían barcas por el Tifón que había habido en Filipinas hacía unas semanas. El mar estaba  muy alterado y no se querían arriesgar. Así que era el primer día que habrían y estaba a tope de furgonetas y de gente esperando. Decidimos quedarnos en un hotel e intentarlo al día siguiente. La playa no era de arena blanca, pero para mí una de las playas con el paisaje de los alrededores más bonitos que he visto en Filipinas. Estuvimos paseando y poniéndonos al día de todos estos meses.

Nos levantamos muy temprano, ya que el chico de la recepción nos dijo que el  intentaría conseguirnos entradas, para nosotros y 4 turistas más que estaban también hospedados en el mismo hotel. Después de una hora esperando nos explicó que las únicas entradas que tenía eran por tierra. Hay dos maneras de poder llegar al río subterráneo con una barquita o caminando por medio de la jungla. Nos comentaron que el camino era de una hora y media y decidimos hacerlo todo el grupo caminando. Éramos 2 suizos, 2 italianos y nosotras dos. No llevábamos guía, solamente íbamos
siguiendo las marcas rojas en los árboles. El camino resultó ser literalmente “cruzar la jungla”, hacía muchísima calor, y íbamos pasando por e medio de árboles, lianas y subiendo y bajando. Cuando llevábamos un ratito mi madre se paró y dijo que no se encontraba bien. Yo pensaba que se iba a desmayar, porqué el calor era sofocante. Se sentó y la chica suiza sin pensárselo dos veces le tiro una botella de agua entera por la cabeza. Gracias a esa botella mi madre se despejó, y pudimos continuar el camino. Ninguno de nosotros se esperaba un camino cómo este. La pareja de italianos iban diciendo esto es un Crimen! Le pienso decir a la chica de la recepción que es una criminal, que si nos quería matar. Después de casi dos horas y medía llegamos al “Underground river”. El camino fue duro, pero a la vez precioso. Imaginaros si yo también estaba apurada que ni siquiera saque la cámara para hacer fotos.

Visitamos el Rio subterráneo, es una cueva de unos 8 kilómetros con estalactitas y estalactitas enorme, Entras con una pequeña barquita, luces en la cabeza y recorres solo una parte. Fue bonito. Aquella tarde cogimos otra furgoneta para ir para nuestro siguiente destino Puerto Barton. Yo no sabía que las distancias entre las diferentes poblaciones eran tan largas, y estuvimos unas 3 horas y media para llegar. La última hora y medía era una carretera de botes. La furgoneta estaba preparada con tracción en las 4 ruedas para poder pasar.

El conductor al llegar nos ayudó a buscar un sitio para dormir, ya que eran casi las 8 de la noche. Al día siguiente hicimos “Island Hopping”, es la manera que los Filipinos le llaman, al coger una barquita y visitar varias islas. Paramos en dos islas y en dos puntos para hacer snorkeling.

El último día del viaje, le pregunté a mi madre  que es lo que le había gustado más de
Filipinas y me dijo, el snorkeling, y los millones de peces y coral que se pude ver debajo del agua. Era súper gracioso porqué no sacaba la cabeza del agua.

Pensábamos quedarnos dos días en Puerto Barton, pero empezamos a preguntar la manera de ir al Nido nuestro siguiente destino y la cosa era bastante complicada, porqué nosotras queríamos salir el día 1 de Enero, y no había barcas ni furgonetas que salieran esa día. Así que decidimos salir el 31 y pasar Fin de Año en el Nido.

A las 6 de la mañana, salíamos con otra pareja en una barquita súper pequeña. El viaje era de unas  5 horas. El ruido del motor era bastante insoportable y ni con los
cascos y música pude evitar escucharlo. Hacía un poquito de frio y nosotros íbamos con nuestras chaquetas. Cuando llevábamos una horita entramos a mar abierto y empezó a saltar el agua. Los dos chicos que iban con nosotros nos dieron un plástico y nos tapamos con él. Parecíamos refugiados huyendo en una patera. No exagero, el agua por encima y nosotras debajo de plástico casi durante 3 horas. Para mí fue uno de los momentos más graciosos del viaje, ver a mi madre durmiendo con el plástico en la cara para protegerse del agua.

Después de más de 5 horas llegamos al Nido, y nos quedamos en el mismo sitio dónde nos quedamos Alex y yo la última vez, The alternative.

La noche de fin de año la hicimos allí. Había un bufet con un montón de cositas para escoger y un “Lechón”, un cerdo entero hasta con la cola. Fue totalmente diferente de lo que estamos acostumbrados a hacer en Barcelona. Ellos ni toman uvas ni cuentan las campanadas. Preparan millones de fuegos artificiales. A las 12 el cielo se llenó de colores, y de humo claro. Los barcos des de el agua también tiraban fuegos  artificiales. Fue diferente pero muy bonito.

Salimos a tomar unas copas y temprano a la cama. Era el cumpleaños de mi madre, y por la tarde le pedí a unos chicos en la playa que le cantaran con una guitarra el cumpleaños feliz. Por la noche le preparé una vela para que pudiera soplar.

El día 1 lo pasamos en la playa, tumbadas disfrutando del sol y del paisaje. Estuvimos en una playa llamada Las Cabañas, dónde estaba lleno de familias Filipinas disfrutando el primer del año juntas. También no puedo dejar de explicar, que mientras desayunábamos delante de la playa había una enorme tortuga paseándose. Yo no me lo podía creer, porqué solo había visto tortugas haciendo submarinismo. Bajé con un chico del hotel al agua, y él la logró coger, pero era tan grande que lo arrastró metros hacía dentro.

No ha sido el único día que hemos visto tortugas, ya que desde la barca, y haciendo snorkeling también hemos tenido la gran suerte de verlas. Es uno de mis animales favoritos, así que empezar el año viendo una, me dio una buena sensación.

Yo había contratado con este hotel 4 días, 3 noches en la isla que estuvimos Alex y yo.  El día 2 salimos para la famosa isla que tanto le había hablado a mi madre. La zona del Nido, es un archipiélago con millones de islas y lugares por descubrir. Hay diferentes compañías que organizan tours para visitar estos rincones. Es lo que  hicimos mi madre y yo cada día, pero en vez de salir des de el Nido salíamos desde nuestra preciosa isla.

Esta es una isla, con una playa pequeñita dos cabañas, dónde viven 4 filipinos que se cuidan de ella. No tiene agua corriente ni electricidad. Así que te tienes de duchar con cubos y por la noche utilizar velas o linternas. Para mí es un sitio súper especial. Los chicos de la isla te tratan como si fueras como una princesa. Cada día nos preparaban la cena en una mesita rodeada de antorchas, con florecitas guarniendo los platos y con comida exquisita. Por la mañana para desayunar también teníamos nuestra mesita con sus florecitas.

Para mi gran sorpresa, mi madre es toda una aventura y ya le he nombrado una backpacker más. En estos tours te tienes de poner a veces por agujeros para poder visitar playas o lagunas escondidas. Ella siguiendo al guía lo hizo todo. Uno de los días estábamos dentro de una cueva y el oleaje empezó a ser fuerte, no nos dio tiempo de salir y nos tuvimos que coger a unos rocas. Yo le decía mama no te sueltes, y ella cómo una garrapata cogida a la roca, suerte de la camiseta de neopreno que llevaba de mi hermano porqué sino tendría todo el cuerpo rascado. Yo con los nervios no me dio tiempo de cogerme y el  agua se me llevó contra la roca, pero no me hizo nada, porque me protegí con las manos.  Otro día tuvimos de pasar por un pequeño agujero para entrar a una playa secreta. Alex y yo no lo pudimos hacer la última vez por el oleaje. Esta vez estaba complicado pero el guía nos dijo que lo siguiéramos y cogidas de la mano de él entramos a la playa.

En resumen, que mi madre ha hecho absolutamente todo lo que yo he hecho, y nunca se ha quejado, sino ha seguido todas las aventuras.

Después de 4 magníficos días en la isla, nos fuimos para nuestro siguiente  destino Boracay, la isla más turística de Filipinas. Según las guías Bora cay tiene una de las 8 playas de la arena blanca más bonitas del mundo. Yo sabía que era turístico
pero no me esperaba tanto.

Salimos de Puerto Princesa y llegamos a Manila a las 11 de la mañana. Teníamos otros vuelo a las 2.30 para Caticlan el aeropuerto de Boracay. Pues como ya he dicho hemos tenido unas cuentas aventuras. Eran las 4 de la tarde y todavía no habíamos embarcado. Entonces nos dijeron que no podíamos volar a ese aeropuerto y que nos enviaban a un aeropuerto que se encontraba a una hora y media, y que nos pondrían un autobús que nos llevaría a Boracay. Salimos a las 6 y medía de la tarde, nos pasamos el día en el aeropuerto. Al final llegamos a Boracay a las 10 de la noche. Como no teníamos nada reservado, le pregunté a un chico al puerto y me dijo que nos llevaría  al resort de su tío.

Resulta que el Resort de su tío era una habitación de mala muerte con cucarachas y en todo el centro de la fiesta. Nos quedamos porque era demasiado tarde para ir a buscar otro sitio. Por la mañana a las 6 ya estábamos despiertas buscando un nuevo sitio para dormir. Tuvimos la gran suerte de encontrar unas cabañas delante de la playa. Para mi uno de los mejores sitios dónde he dormido durante este viaje. Eran unas cabañas de bambú, antiguas, pero el lugar era precioso, y transmitía mucha tranquilidad.

Yo no recomendaría Boracay, porqué es demasiado turístico para mí, han destruido la isla, y hay mucho turismo sexual. La playa es muy bonita, y tuvimos la suerte de dormir en una zona tranquila y disfrutar de nuestro espacio.

La última aventura, fue la última noche que dormimos en un hotel al lado del  aeropuerto de Boracay porque nuestro vuelo era a las 7 de la mañana. Mi madre volaba ese mismo día hacía Barcelona a las 6 de la tarde. Así que teníamos horas de sobras para llegar con tiempo a Manila. Esa noche no paró de llover y hacía un viento que parecía que arrancábamos a volar. Ninguna de las dos dijo nada, pero no dormimos en todo la noche, pensando que las condiciones meteorológicos iban a impedir volar al día siguiente con las consecuencias que mi madre podía perder el vuelo. Finalmente no paso nada y pudimos volar.

Han sido unas dos semanas fantásticas con mi madre, me lo he pesado genial y para mí ha sido súper especial poder compartir parte de este viaje con ella. Así ha podido ver cómo viajo, y que es un día a día para mí. No reserve casi nada, y fuimos a la aventura total cómo voy yo hasta fecha de hoy.

Ahora estoy en el vuelo para Kuala Lumpur, para de aquí 2 días coger un nuevo vuelo para mi siguiente destino Nueva Zelanda.

Ayer que se fue mi madre, fue el día más duro de todo mi viaje. Cuando me despedí en Barcelona de mi familia, y amigos, me iba cargada de pilas y con mucha ilusión. Ahora despedirme en medio de mi viaje, ha sido muy duro. Mi energía está bastante baja, y llevo 7 días con antibióticos por sinusitis. Así que un acumulo de situaciones hicieron de ayer un día duro. Pero ahora sentada en el avión escribiendo esto miro por la ventana y sonrío por poder estar haciendo esto.

Mami, mil gràcies per venir, ha sigut genial compartir aquests dies amb tu, t’estimo molt, molt.

 

RESUMEN DE LOS LUGARES VISITADOS EN FILIPINAS DURANTE 1 MES Y 20 DÍAS EN ESTE PAÍS:

LUZON:

zona a unas 10 horas al norte de Manila:

En ella puedes visitar Banaue, Batad, Sagada, diferentes poblaciones de la zona. Es zona de trekking de montaña, no hay playas. Para mí el mejor paisaje de montaña que he visto nunca.

ISLA DE PALAWAN:

Hay dos aeropuertos el de Busuanga en el norte de Palawan y el principal de Puerto Princesa.

Nosotros hiciemos Manila Busuanga para visitar Coron, hacer las inmersiones en los barcos de la segunda guerra mundial.

Coron- El nido: 6 horas en barco, sale cada día.

El Nido: visitar todo el archipiélago haciendo los diferentes tours.( Mi zona favorita de Filipinas.)

Puerto Barton: zona tranquila, con una playa bonita, para descansar unos días

Sabang: Underground River

 

ZONA DE LAS VISAYAS:

Isla de Siquijor:
la más auténtica y natural.

Tiene pocos hoteles, playas de arena blanca, cascadas y su población es fantástica.

Isla de Bohol:
Es turística, pero no demasiado.

Se pueden visitar las chocolate Hills, el Loboc River y el Tasher el mono mas pequeño del mundo.

Isla de Camiguin:
Isla con 7 volcanes activos.

Tiene aguas termales frías y calientes, cascadas.

Las playas son de arena volcánica, y solo hay una playa de arena blanca.

Isla de Malapascua:
Es una isla muy pequeñita, que la puedes hacer caminando.

Muy conocida porqué haciendo submarinismo se pude ver el “Treasuer Shark”

Isla de Boracay:
La isla mas turística de Filipinas con una playa de 5 kilometros de arena blanca.

MEDIOS DE
TRANSPORTE:

Para viajer en Filipinas, se necesita moverse en avión y ferries. Hay que contar que aunque puedes encontrar vuelos económicos, el presupuesto se dispara un poquito.

DINERO:

Hay que calcular unos 40 euros al día mínimo. Si no te mueves mucho con la mitad puedes sobrevivir, pero si haces submarinismo, y te mueves bastante de isla en isla, los ferrys y aviones hacen subir el presupuesto.